La joyería de plata es una elección popular porque combina durabilidad con un diseño elegante que puedes usar a diario sin preocuparte demasiado por su mantenimiento. Sin embargo, para que tus piezas conserven su brillo y calidad por años, es importante darles un cuidado básico. Si cuidas tu joyería de plata correctamente, puede durar hasta 40 años o más. Aquí te contamos cómo hacerlo:
¿Es plata de verdad?
Si obtuviste tu joyería de nuestros productos, te garantizamos que es plata de ley 925. Pero si deseas verificar la autenticidad de una pieza por tu cuenta, existen formas fáciles de comprobarlo:
- Busca el sello “925”: Dentro de la banda o cadena de la joyería auténtica encontrarás el sello “925”, que indica que está hecha de plata de ley. Usa una lupa o la cámara de tu teléfono para verlo con detalle.
- Prueba con un imán: La plata no es magnética. Si un imán se adhiere a tu pieza, probablemente no sea auténtica.
- Prueba con hielo: La plata tiene alta conductividad térmica, por lo que derrite el hielo más rápido que otros metales. Coloca la joya sobre un cubo de hielo y observa cómo actúa.
- Sin olor ni residuos: Frota la pieza con un paño; si deja residuos o huele a azufre o metal, es falsa. La plata auténtica es inodora.
Cómo mantener el brillo
Aunque la plata es resistente, hay ciertos cuidados esenciales para prolongar su vida y mantenerla impecable:
- Evita productos químicos: Quítate la joyería al limpiar, nadar en piscinas con cloro o manejar productos abrasivos como lejía. Si ocurre contacto, límpiala rápidamente para minimizar el daño.
- Guarda tu joyería correctamente: Después de usarla, asegúrate de que esté seca antes de guardarla. Lo ideal es almacenarla en un lugar seco y oscuro, como un cajón o una caja para joyas con compartimentos separados para evitar que las piezas se rayen entre sí.
- Evita envoltorios de plástico: No envuelvas tus piezas en plástico, ya que puede dejar marcas. Simplemente utiliza una caja o bolsa de tela para almacenarlas.
Cómo limpiar tu joyería
Para esas piezas que han acumulado polvo, aquí tienes una rutina fácil para devolverles su brillo:
Necesitarás:
- Un recipiente de acero inoxidable.
- Un cepillo de dientes con cerdas suaves.
- Detergente para platos.
- Agua caliente.
- Bicarbonato de sodio.
- Un paño suave y seco.
Pasos a seguir:
- Mezcla el bicarbonato de sodio con el detergente hasta formar una pasta.
- Llena el recipiente con agua caliente y sumerge las piezas durante 3 minutos.
- Retira las piezas y frótalas suavemente con el cepillo utilizando la pasta.
- Enjuaga con agua tibia y seca con el paño suave.
¡Listo! Tus joyas quedarán como nuevas y listas para lucirse.
Conclusión
Con estos simples cuidados, puedes garantizar que tus piezas de plata de ley sigan brillando por décadas. Recuerda: cada uno de nuestros productos de Glowish contiene joyas sorpresa valuadas entre $500 y $10,000. ¡Empieza tu colección y encuentra tu brillo!
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